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sábado, 20 de febrero de 2016

Estrategias especiales para solucionar problemas verbales


Si se te dificulta entender y solucionar problemas verbales, aquí tienes algunas ideas para ayudarte a resolver este tipo de problema matemático.

Simplifica el problema visualmente
  • Subraya, circula o usa marcadores fluorescentes para resaltar la información importante en el problema.
  • Circula las palabras o frases claves en el problema verbal y entonces tacha el resto del contenido.
  • Reemplaza las palabras que te indican las operaciones en el problema (suma, resta, multiplicación, división) por sus signos operacionales.
  • Lee cada oración del problema verbal, una a la vez, y decide si necesitas esa oración en particular para poder resolverlo. Tacha lo que no necesites.
  • Desarrolla una imagen mental del problema verbal. Puedes reforzar tu imagen mental dibujando la situación planteada en el problema.
  • Dibuja un círculo alrededor o coloca dentro de un marco cada sección importante en el problema —o alrededor de los diferentes pasos que tienes que seguir— para que separes cada paso visualmente.

Ordena la información en una secuencia
  • Escribe números sobre las oraciones claves del problema y de acuerdo al orden en que tienes que usar la información.
  • Sigue un procedimiento paso-a-paso. Tienes que pensar en solucionar el problema verbal completando un paso a la vez. Solamente cuando has completado el primer paso puedes moverte al segundo paso del problema y entonces al tercero. Controla el impulso de “resolver” el problema en un solo paso.
  • Puedes separar los diferentes pasos del problema con colores. Por ejemplo, el primer paso es siempre rojo, el segundo es siempre azul y el tercero verde.
  • Antes de empezar a resolver el problema verbal, predice la cantidad de pasos que necesitarás para resolverlo y explica tu predicción.

Simplifica la computación requerida en el problema
  • Si computar se te hace difícil, puedes sustituir números más grandes por otros más pequeños. Por ejemplo, si tienes que multiplicar 465*86, multiplica 4*8 primero. El resultado del cálculo más fácil es 32, lo que te da una idea del resultado más complicado (alrededor de 32,000; los tres ceros reemplazan a los otros tres dígitos en el problema). Solo entonces resuelves la multiplicación principal (su contestación es 39,990).
  • De manera similar, puedes sustituir números más difíciles con números más fáciles. Continuando con el ejemplo anterior, resolverías primero 400*80 (32,000).

Rompe un problema largo y complicado en varios problemas fáciles y cortos
  • Trata de encontrar una parte en el problema verbal que se te hace más fácil y continúa desde ahí.
  • Rompe el problema verbal en dos o tres mini-problemas, con cada paso como un mini-problema. Resuelve cada mini-problema y entonces combina los resultados parciales en el resultado total o final.
  • Similarmente, puedes romper el problema en dos o tres preguntas, contesta cada pregunta por separado y finalmente puedes combinar los resultados parciales.

Usa la siguiente estrategia para solucionar problemas verbales
Sigue estos pasos:
  1. Lee el problema verbal por primera vez para que tengas una idea de lo que se trata.
  2. Lee el problema por segunda ocasión, esta vez, toma notas de la información que el problema ya contiene. Contesta, “¿Qué información ya tengo?”.
  3. En una tercera lectura, decide lo que el problema te está pidiendo que hagas. Contesta, “¿Qué necesito encontrar aquí?”.
  4. Usa objetos o haz dibujos para que puedas visualizar (crear una imagen en tu mente) el problema.
  5. Escribe tus contestaciones parciales al problema.
  6. Combina tus contestaciones parciales en una contestación total o final.

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Educación > Autoayuda > Disciplina > Emociones del niño

Atención maestro: ¿Necesitas un modelo en educación emocional para implementarlo en el aula? Entonces, echa un vistazo a este innovador recurso:

 

RET

La fórmula para educar niños emocionalmente inteligentes

Una guía psicoeducativa para padres y maestros

 

Sinopsis:

Un informativo viaje dentro del fascinante mundo emocional del niño para entender los pensamientos y sentimientos que, de manera negativa o positiva, influencian su comportamiento. Aplicando los principios RET (pienso — siento — actúo), nuestros niños aprenden a superar los retos de sus situaciones personales difíciles, manejando mejor su mundo emocional.

Descripción larga:

«RET: La fórmula para educar niños emocionalmente inteligentes» de Carmen Y. Reyes es una innovadora guía psicoeducativa para padres, maestros y otros profesionales al servicio de los niños. Por décadas, los maestros y personal auxiliar sirviendo a niños con necesidades especiales han usado intervenciones cognitivas-emotivas para ayudar a niños crónicamente disruptivos, en particular, niños con problemas de coraje recurrente y niños agresivos. Siguiendo un sistema de regulación emocional conocido como «Modelo ABC de las Emociones», los niños estresados aprenden cómo su conducta agitada en el punto C (la consecuencia) no es una reacción a lo que les pasó en el punto A (el antecedente), sino una reacción a lo que ocurrió en el punto B (el punto de sus creencias o beliefs en inglés); o lo que es lo mismo, la conducta alborotada del niño en C es una reacción a B; o sea, una respuesta a su creencia o a lo que el niño está pensando y creyendo sobre lo que le pasó. Más específicamente, los sentimientos de coraje del niño y sus conductas agresivas son consecuencia directa de ambos: (a) sus pensamientos negativos acerca de lo que le pasó y (b) su habla privada o personal negativa (las cosas negativas y pesimistas que el niño se está diciendo a sí mismo). Influenciándose mutuamente, los pensamientos negativos y su habla privada pesimista son creados y repetidos hasta la saciedad en la mente del niño en su punto emocional B, o en el nivel de sus creencias. Central a la filosofía RET está la premisa de que las cosas que nos pasan (los eventos) no son ni buenos ni malos; ni positivos ni negativos. Por lo tanto, los eventos no nos influencian; tampoco determinan nuestra conducta o las cosas que hacemos. Lo que verdaderamente nos influencia a comportarnos como lo hacemos es nuestra percepción e interpretación personal de A (del evento). Por ejemplo, al percibir el evento como «horrible y espantoso; una pesadilla», el niño «le pega una etiqueta negativa» a ese evento (el evento fue «humillante» para el niño), y entonces, el niño reacciona a su etiqueta (humillado y en actitud vengativa), en lugar de responder objetivamente al evento actual. Si pensamos esto más detenidamente, podemos darnos cuenta de que en esta premisa RET existe una poderosa idea: Nuestras emociones, positivas y negativas, no ramifican de nuestro medioambiente o de las cosas que nos pasan, sino de lo que pensamos y creemos acerca de las cosas que nos pasan. Esto conduce directamente a un segundo postulado, quizás más empoderante que el anterior: Todos tenemos un alto grado de control sobre la manera en que nos comportamos y sobre nuestra conducta en general. Si no nos gusta la forma en que nos estamos sintiendo (o comportando) en relación a un evento, todo lo que tenemos que hacer es cambiar la manera en que estamos pensando en relación a ese evento. En esta informativa guía en educación emocional, la autora detalla el procedimiento RET para niños, presentando intervenciones especialmente diseñadas para ayudar a los niños a tomar el mando de sus sentimientos, lo cual, por extensión, los ayuda a asumir sus responsabilidades personales y a reclamar el control sobre su propia conducta. El modelo RET y sus procedimientos son apropiados para manejar niños con problemas de coraje, con déficits en destrezas sociales/pobres interacciones, o simplemente para ayudar a niños con conductas típicas, pero que están batallando contra las preocupaciones y pesares inherentes a su crecimiento mental y emocional.

Tópicos desarrollados en esta guía:

Autocontrol

Autodisciplina

Autoeficacia

Autoestima del niño

Autoimagen del niño

Autonomía y responsabilidad

Pesimismo/Optimismo

Dando apoyo emocional al niño

Niños estresados

Manejo del coraje

Conducta del niño

Emociones del niño  

Inteligencia emocional

Pensamiento y razonamiento crítico

 

6x9/122 págs

En formatos impreso y digital

8.00 Edición Digital/16.00 Edición Impresa (USD)

7.20 Edición Digital/14.40 Edición impresa (Euros)

 

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